Cómo reconocer los síntomas de la apendicitis

La apendicitis es la inflamación del apéndice debido a la multiplicación de las bacterias, normalmente es ocasionada cuando la entrada del apéndice se ve bloqueada o cuando existe una infección gastrointestinal viral. Una persona a la que se le ha diagnosticado apendicitis requerirá de una apendicetomía, o de alguna cirugía que implique remover el apéndice. Si la condición no es tratada, el apéndice puede romperse y resultar en la muerte. La apendicitis se considera una emergencia médica, así que es importante saber cómo reconocer los síntomas de la apendicitis para saber cómo ayudar.

 PASOS

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   Pon atención a los dolores en la región abdominal. Si el dolor es severo, llama a un doctor inmediatamente. Si el dolor es moderado o leve, pon mucha atención. El dolor de la apendicitis normalmente comienza cerca del ombligo, y eventualmente se mueve a la sección inferior derecha del abdomen. Sin embargo, el dolor también puede sentirse en otras partes del estómago, así que no descartes la apendicitis solo porque no sigue la “ruta” típica. Puede que también tengas dolor en partes que no sean las más comunes. Si el dolor no se va después de unas horas, llama a un doctor.
   
   
   • El dolor puede empeorar cuando te muevas, camines o tozas.
   • Normalmente se volverá más agudo y severo con el tiempo conforme la inflamación se distribuya a los tejidos cercanos.
   • El dolor puede calmarse un poco cuando te acuestes de lado y acerques las rodillas a tu pecho.
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   Evita los laxantes y los medicamentos para el dolor si sospechas que tienes apendicitis.
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   Haz la prueba de la presión. Aplica presión en el área donde te duele y suelta rápidamente. Si tienes apendicitis, el área estará delicada cuando apliques presión. Cuando sueltes, el dolor se sentirá un poco más fuerte debido al rebote.
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   Revisa si tienes otros síntomas de apendicitis. No todos tendrán estos síntomas, pero saber cuáles son ayudará a reconocer la enfermedad si es que se presentan.
   • Pérdida de apetito.
   • Nausea y vómito.
   • Hinchazón abdominal
   • Constipación
   • Diarrea
   • Dolor de espalda
   • El sentimiento de que al defecar se sentirá uno mejor.
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   Eventualmente tendrás problemas para pararte derecho.
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   Consulta a un médico lo más pronto posible. Esto es importante especialmente con los niños, que son más propensos que los adultos a sufrir de una ruptura del apéndice. Sus síntomas no son siempre los típicos, y es fácil malinterpretar el dolor de apéndice como dolor estomacal – si llegas a sospechar de apendicitis, llama a un doctor. Existen otras condiciones que presentan síntomas similares que también son serias y también requieren de atención médica, tales como la gastroenteritis (inflamación del estómago y de los intestinos), diverticulitis (inflamación del divertículo que causa infección), enfermedades inflamatorias del pelvis y enfermedades renales.

 CONSEJOS

• La complicación más seria de la apendicitis es la ruptura, la cual lleva a la peritonitis, una infección peligrosa que ocurre cuando las bacterias y otros elementos del apéndice rasgado se fugan a la cavidad estomacal y forman un absceso, una masa llena de fluidos y bacterias.
• Muchas mujeres que han desarrollado apendicitis durante el embarazo no presentan los síntomas clásicos. En tercer trimestre es el más riesgoso.
• Los niños pequeños con apendicitis presentan problemas al comer y tienen más sueño de lo normal. Pueden reusarse a comer incluso sus alimentos favoritos, sin mostrar interés alguno en ellos.
• Las personas con condiciones especiales pueden no experimentar los síntomas comunes de apendicitis y pueden tener tan solo un sentimiento general de malestar. Estas condiciones incluyen:
  • Obesidad
  • Diabetes
  •  VIH
  •  Cáncer o bajo tratamiento de quimioterapia
  • Trasplante de órgano
  •   Embarazo
  •   Niños pequeños
  •   Ancianos
• También existe una condición llamada cólico apendicular. Son unos calambres severos en el abdomen ocasionados por espasmos y contracciones del apéndice. Puede ser ocasionada por obstrucción, tumor, cicatrices o materiales extraños. La condición puede ser difícil de diagnosticar, causando mucha angustia en el infante, pero muy probablemente resulte en apendicitis.

 ADVERTENCIAS

• No dejes de ir al doctor en cuanto sospeches de apendicitis. Un apéndice desgarrado puede ser letal. Si vas a la sala de urgencias y te mandan a casa sin tratamiento, asegúrate de regresar a que te re examinen si los síntomas empeoran. No es raro que los síntomas evolucionen con el tiempo hasta que se vuelve necesaria la cirugía.
• Retrasar los tratamientos puede ocasionar que uno termine utilizando una bolsa de colostomía por varios meses, o de por vida.